Date with the night

Cuando estás acostumbrado a andar tanto por el metro y/o por Madrid, haces las cosas sin pensar. Te juegas el estar perdido, el que te pille un coche, el que te violen en un callejón... pero todo eso son chorradas, porque eres madrileño y molas mil.
Si te pierdes, miras al cielo y cuando veas un edificio muy alto, dirígete hacia allí, que seguro que hay una boca de metro.
Si te pilla un coche, habrá un millón de personas cruzando en rojo, como tú, y estarán de testigos (lo que hará que te lleven al hospital más deprisa)
Si te violan en un callejón, seguro que hay algún mendigo que lo presencia todo y puede testificar en el juicio (hay que ir a juicio, chicos y chicas, sólo así se mantiene una vida de tranquilas facilidades)
Porque sí, porque somos madrileños y molamos mil.

¡De Madrid al cielo!