Hace un millón de años que se ha perdido la confianza. Podría cruzar los dedos o las piernas hasta esperar que una inspiración alegre me alcance, como un rayo en una tormenta de verano. No me gusta escribir de cosas tristes porque eso significa que, muy seguramente, estaré sudando sobre el papel. Porque pienso “pero qué tonta he sido, con lo bien que estaba yo siendo infeliz”. Y si subes alto, más grande será la caída. No hay escapatoria la gran mayoría de las veces y los demás están contentos cuando te escapas por la puerta de atrás.
Tu vida sigue sin mi pelo en tu almohada y yo lo asumo con un silencio pausado.
Esta exasperante quietud de los días.
4.12.2010
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2 comentarios:
La quietud de los días no puede sino ser exasperante, sobre todo, cuando una está esperando un rayo y desesperando en la calma
hey buen blog sobre todo por que escribes poca madre. bah.... de eso es este blog. ok escribe pronto mas please
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