Como un aparatoso estado de standby. Se siente como si uno estuviese eternamente dormido, esperando a que algo grande pase y cambie tu vida para siempre. Porque uno no puede conformarse con lo mediocre.
“Eres extraordinario”, susurran los árboles mientras las hormigas les muerden.
Y todo el mundo es mejor que tú, y las vidas de los demás son más interesantes. Entonces, te decides a hacer algo y te das cuenta de que el tiempo ha pasado, de que el plazo ha expirado y vuelves al hiberno. A esperar que algo grande pase. Días y horas y pequeños minutos que se te clavan en las sienes a golpe de segundero. 60 puñaladas, ni más ni menos.
Todo el romanticismo, creo, se ha acabado.
11.14.2008
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7 comentarios:
Concéntrate en lo pequeño.
Lo grande viene solo.
nadie es pejor
Hola,
suelo entrar por aquí de vez en cuando y siempre me ha llamado la atención la foto de "stadtmitte"... parece hecha en el metro y en alemania... ¿podrías decirme dónde la hiciste?
Verás, estoy en alemania y el finde que viene voy a Berlín y no sé por qué me da que podría ser por allí.
Gracias y felicidades por el blog.
Así es, esperar como estado del alma... Como esperamos cuando escribimos que aparezca la palabra "ábrete sésamo"... Acabó el romanticismo, sí; quedamos sus excrecencias... Saludos y ojalá me leas...
Uno no debe conformarse con lo mediocre.
Pero a veces pasamos por momentos asi, nuestra voluntad esta detenida esperando alerta algo que pensamos que va a pasar pero que no sabemos que es.
Sacher, Stadmitte es una parada de metro de Berlín.
También da miedo esto tan grande que tiene que pasar.
Abrazo.
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